Archivos para las entradas con etiqueta: Binissalem

El mejor vino no es necesariamente el más caro, sino el que se comparte”. George Brassens.

A veces parece que todo el que viene a Mallorca solo busca playa y sol. Los habitantes de lugares con inviernos largos, oscuros y fríos sueñan con la vitalidad de la luz mediterránea e, incapaces de resistir el bienestar que transmite, no suelen pedir más. Pero hay una minoría que gusta de recorrer ese espacio adicional que marca la diferencia entre el simple turista y el viajero. Hablo de aquellos que desean conocer la vida, cultura y costumbres locales, para entender mejor a quienes los acogen.

GRAPES IN THE VINEYARD-001

Para ello nada mejor que interesarse por celebraciones como las de la Vendimia —Sa Vermada— que todos los meses de Septiembre tiene lugar en Binissalem y que trae una fiesta dentro de otra —el sopar a la fresca— que te llevará a descubrir . . .

1.- Que el pueblo engalana sus casas, saca sus mesas a la calle y cada familia se desvive por atender a sus invitados, sean amigos, conocidos, isleños o forasteros en un ejercicio de generosa hospitalidad. ¿Quién dijo que los mallorquines eran cerrados?.

DSC02621

2.- Que un pueblo que sabe guardar sus tradiciones se respeta a si mismo. Gusto por la cocina de la tierra. Sabor y memoria. Raíces.

DSC02633

3.- Que una mesa con un buen vino servido, agasaja a los invitados y engrandece a los anfitriones, atrae alegría y hace que fluya la vida desgranada en mil conversaciones alrededor de sus bondades y de las preferencias de los presentes. Un verdadero placer cultural.

2012-09-28 19.20.53

4.- Que nada hay más civilizado que facilitar el encuentro social. No conozco mejor antidepresivo que tener la ocasión de brindar por la vida en buena compañía.

CELEBRACIÓN

5.- Que siempre encontraremos a algún contertulio que nos seducirá con apasionadas explicaciones sobre los ritos ancestrales que llevan a producir buenos caldos, desvelándonos alguno de sus misterios cuasi alquímicos, aquellos que nos harán sentir un deseo irresistible por ir a conocer una bodega al día siguiente.

DSC_0690-001

6.- Que a partir de ese momento nunca miraremos igual a un viñedo, con sus rojas tierras calcáreas y el verdor de sus vides bajo el azul intenso de los cielos mediterráneos, recordando que la crianza y producción del vino se remontan a los asirios, que fueron los pioneros de la agricultura vitícola, allá por el S.VII (AC).

DSC_0775-001

7.- ¿Que quién no es capaz de emocionarse al ver en un campo de viñas un rosal encabezando cada línea de vides? como sucede el los viñedos de las Bodegas J.L. Ferrer y así recordar al poeta, matemático y astrónomo Omar Jaiyam, nacido en el año 1.050 en Jorasán (Irán) autor del poema “Días de vino y rosas” hermoso canto al amor y a la alegría de vivir:  “El vino es color de rosa. Quizás no sea la sangre de la vid, sino la sangre de las rosas“.

DSC_0781-001

8.- Que tras escribir esta entrada, bajaré la luz, encenderé una vela, pondré a Ella Fitzgerald con Louis Armstrong en el equipo de música, abriré una botella de vino tinto ecológico Pedra de Binissalem y beberé despacito un buen vaso, acompañado de  pa amb oli. Después cerraré los ojos y soñaré con el Mediterráneo.

PA-AMB-OLI-001______________

En la segunda quincena de Septiembre de cada año, se celebra en el pueblo vinícola de Binissalem La Festa des Vermar o Sa Vermada, que viene a coincidir con el final de la vendimia y con el del verano, por eso el pueblo se abre a los visitantes e invitados, en un ambiente de alegría en el que todos participan.

Aunque el origen de las fiestas de la vendimia se pierde en el tiempo, fueron los griegos los que comenzaron a celebrar el final de la cosecha, como agradecimiento a sus dioses por los frutos de la tierra, en el que el vino jugaba el papel de puente entre los hombres y la divinidad. Fueron los fenicios los primeros que trajeron vino a Mallorca, aunque los que instituyeron el cultivo de la vid a partir del año 123 (AC) fueron los romanos. En la imagen «El triunfo de Baco» de Diego Velázquez.

Velázquez_-_El_Triunfo_de_Baco_o_Los_Borrachos_(Museo_del_Prado,_1628-29)

En 1.965 comenzó a celebrarse Sa Vermada en Binissalem de manera sistemática y organizada, gracias al impulso de Llorenç Moyà Gelabert de la Portella y de su grupo de amigos del Club Atlant, con el propósito el de rendir culto al mundo del vino y a las tradiciones agrarias que conectan a los binissalemers con su tierra. Después de más de 50 años, esta tradición se ha convertido en una de las fiestas más importantes de Mallorca.

En los nueve días que duran las celebraciones, se desarrollan actos religiosos, bailes tradicionales de bot, desfiles, verbenas, una batalla de uvas, una comida colectiva de fideus de vermaar en Can Arabí, la cena en la calle conocida como sopar a la fresca, competiciones deportivas, concursos de pisada de uvas y de cata de vinos en exaltación de la tierra y sus productos. Estos actos suelen tener una multitudinaria asistencia que da al pueblo un ambiente alegre y colorista. Puedes consultar el programa del presente año en la web del Ayuntamiento (solo en mallorquín).

DSC02647

BAILE DE BOT-001

Los fideus de vermaar son el plato tradicional por excelencia. Se trata de una consistente sopa de fideos gruesos y carne de oveja, cocinada durante muchas horas sobre la base de un buen sofrito que la convierte en un alimento sabroso, de los de siempre, que sabe a lo que es sin necesitar de más adornos.

FIDEUS

Y tú, querido lector ¿te acercarás también a Binissalem para celebrarar Sa Vermada?

____________

Créditos: Fotografías del autor con Licencia Creative Commons: Attribution Share Alike, salvo aquellas que en sus créditos indiquen otro origen.

C0C Básico

Código de Confianza C0C Básico. Para la elaboración de este contenido, no he recibido muestras de los productos o servicios mencionados, ni he recibido incentivo o atención de ningún tipo, ni mantengo relación especial con los representantes de las marcas citadas.

Anuncio publicitario

“Beati hispani, qvibvs vivere bibere est”. (Dichosos los hispanos, para los que vivir es beber).

Sacrificio_a_Baco_(Massimo_Stanzione)

No creo que fuera Quinto Cecilio Metelo, conquistador de Mallorca para el Imperio Romano, quien acuñara esta frase, pero no es menos cierto, que en la isla hay evidencias del consumo y comercio del vino que datan, al menos, del siglo VII (A.C.) y que el historiador romano Cayo Plinio el Viejo, escribió en su tratado Naturalis Historia que “los vinos baleáricos se comparan con los mejores de Italia”. Es también hecho probado que las culturas mediterráneas siempre se han desarrollado entre buenos caldos.

Roses-FerrerPero no nos vayamos tan lejos, pues corría el año 1.931 cuando un joven ingeniero mallorquín, recién llegado de Francia con su flamante título de Enología bajo el brazo, desató su espíritu visionario fundando la Vinícola de Binissalem. Era el periodo entreguerras y, su empeño, quizá estaba fundado en el éxito que tuvo en otros tiempos la producción de vinos en la isla, hasta que una terrible plaga de filoxera terminara con ella. El inquieto ingeniero decidió aplicar los frutos de la formación que recibió en Francia a la producción tradicional, dándoles un toque de modernidad y lanzándose a vivir una aventura enológica que pervive hasta nuestros días.

BODEGA 1931

José Luis Ferrer Ramonell se llamaba este joven empresario que hoy presta su nombre a las Bodegas más antiguas de Binissalem y sus logros fueron, entre otros, la implantación de métodos de producción actualizados para los vinos mallorquines, con el propósito de obtener caldos de la mejor calidad aptos para el consumo local y, lo que es más relevante, para la exportación.

José L. Ferrer

Como la filoxera era una plaga de compleja erradicación, introdujo en Mallorca la llamada cepa de pie americano que, con su característica forma de “Y”, no era atacada por estos insectos, siendo pionero en el empleo de lo que hoy denominamos “viticultura ecológica”. 

Consumir vino a granel era la costumbre en la época, pero como ese método no permitía la creación de productos de calidad suficiente, decidió embotellarlo para que su transporte y venta fuera más sencillo, pero antes de su pase a la botella, lo transvasaba durante cierto tiempo a barricas de roble para que madurara, tal como había aprendido en Francia, porque mejoraba su calidad vinícola y su evolución.

Sabiendo que en la isla no existía tradición de vinos blancos, decidió crear una línea original con uvas autóctonas, lo que le permitió completar su oferta de buenos vinos, logrando con su incansable actividad —también como comercializador—, exportarlos a Europa y Estados Unidos. Fue un adelantado a su época pues demostró que, con ingenio y esfuerzo, en Mallorca podían implantarse industrias y lo hizo, en un tiempo en el que la isla no andaba precisamente sobrada de recursos, pues el turismo tal como lo conocemos hoy, no comenzó a desarrollarse hasta los años 50 del siglo XX.

Nota: Pulsa en las fotografías de la galería para ampliarlas

Fue tal la pasión del fundador en su Bodega, que hoy día sigue siendo regentada por los Roses Ferrer de la tercera y cuarta generación de la familia, cuyos miembros nunca se conformaron con el legado recibido y no han cesado de trabajar para enriquecerlo, experimentando y viajando por el mundo para mantenerse al día en técnica enológica y nuevos métodos de producción. Gracias a ello, hoy día cuentan con una amplia gama de vinos blancos, rosados, tintos y brut espumosos, incluyendo una línea especial de vinos ecológicos.

Esta familia de vinateros lideró los esfuerzos por conseguir crear una denominación de origen para los vinos de Binissalem, lográndolo por fin a finales de 1.990. Las denominaciones de origen garantizan que todos los vinos elaborados, lo son bajo los auspicios de un Consejo Regulador que controla la producción y comercialización de los caldos, con el fin de que tengan la calidad y características distintivas dispuestas en su reglamento. Las Bodegas de José Luis Ferrer, por expreso deseo de sus propietarios, fueron inscritas con el número dos en esta denominación de origen, gesto de modestia que habla de la gran calidad humana de las personas que así lo dispusieron, haciendo buenos los famosos versos de Calderón:

Y así de modestia llenos / a los más viejos verás / tratando de ser lo más / y de aparentar lo menos.

DSC_0712

DSC_0792 DSC_0797

Gracias a un buen amigo, bisnieto del fundador de la bodega, tuve la fortuna de conocer en primera persona el largo y delicado proceso de creación del vino, así como de apreciar el amor  que generaciones sucesivas de descendientes del Sr. Ferrer han volcado en sus productos. No es un secreto que esto solo se obtiene con una sabia combinación de sabiduría tradicional y de técnicas actuales pues, no en vano, el vino es una sustancia viva que como tal, precisa de una exquisita atención desde el momento en que se injerta una viña, hasta el etiquetado de un reserva especial.

 El premio al esfuerzo para lograr vinos excelentes, es el reconocimiento y galardones que los caldos de José L. Ferrer han alcanzado dentro y fuera de nuestras fronteras, habiéndose convertido en todo un símbolo de Mallorca en el Mundo.

___________________

Si te atrae el conocer cómo es por dentro esta bodega y aprender cómo se crea el vino, puedes concertar una visita siguiendo las indicaciones de su página web. Allí te ilustrarán sobre su producción, aprenderás qué es el despalillado, la decantación, la clarificación, la fermentación, la crianza en barricas de roble y el embotellado. Si tu curiosidad no ha sido saciada, pregunta y aprenderás también otras mil curiosidades del noble arte del bodeguero, tan antiguo como el propio Mediterráneo y tan arriesgado —y a la vez tan remunerante— como navegar sobre él.

Otra información de interés relacionada con el vino:

En la web Comprar Vino Mallorquín tienes información y acceso a todas las bodegas de la isla y a sus especialidades, sin tener que desplazarte. No hace falta acercarse a Binissalem para adquirir ricos caldos mallorquines, pues aquí están a un click de distancia.

El título de esta entrada es un juego de palabras con el nombre de la familia propietaria de las bodegas y con el del poema «Días de vino y rosas» del poeta, matemático y astrónomo Omar Jaiyam, nacido en el año 1.050 en Jorasán (Irán), hermoso canto al amor y a la alegría de vivir: «El vino es color de rosa. Quizás no sea la sangre de la vid, sino la sangre de las rosas«.

sello-C1C-100x83 Esta entrada ha sido escrita bajo las premisas del Código de Confianza C1C Relación: «Para la elaboración de este contenido, no he recibido muestras de los productos mencionados, ni he recibido incentivo o atención especial de ningún tipo, aunque mantengo relación con los representantes de la marca.

Créditos: Fotografías del autor, excepto la del Sacrificio a Baco de Massimo Stanzione, de Wikimedia Commons.

A %d blogueros les gusta esto: