“Isla yo soy del reposo / en medio el mar de la vida, / y el marinero allí olvida / la tormenta que pasó; / allí convidan al sueño / aguas puras sin murmullo, / allí se duerme al arrullo / de una brisa sin rumor”. José de Espronceda, Poeta, Periodista y Militar del Romanticismo.
Fundado poco después de la conquista de la Isla por el Rey Aragonés don Jaime-I, en 1268 ya contó con su primera capilla y, en 1273, el lugar donde un pastor halló una imagen de la Virgen contaba con una notable afluencia de peregrinos. Dice la tradición que la talla descubierta fue llevada a Sant Pere de Escorca, pero al poco desapareció y, de nuevo, fue hallada en el peñasco en el que el pastor la encontró.
Desde ese momento, el crecimiento del Monasterio fue imparable. En 1456 se fundó la Colegiata; de 1622 data la Iglesia actual de estilo Renacentista que, en 1707, recibió el título de Capilla Real y más tarde, en 1962, el de Basílica Menor. Desde 1891 los Misioneros del Sagrado Corazón regentan el Santuario, que junto a la Seo de Palma, conforman los dos lugares donde se destila la esencia religiosa y cultural de los mallorquines. No es pues de extrañar, que cada año sea visitado por más de un millón de personas.
Como todos los Monasterios, el de Lluc está situado en un lugar privilegiado de la isla, en plena Sierra de Tramontana. Su nombre deriva de la palabra latina lucus, que podría traducirse por foresta sagrada. Rodeado de bosques de encinas y peñascos, los alrededores del Monasterio transmiten la serenidad necesaria para poder encontrarse con uno mismo, si eres de esa clase de personas que a veces gustan de mirar a su interior, escuchar y recibir . . .
En todas las religiones del mundo, el hecho de peregrinar supone una búsqueda de la iluminación y en Mallorca, muchos caminos conducen al Monasterio de Lluc, todos ellos son empinados, como una metáfora de la vida. La dureza del recorrido por las antiguas trochas de piedra, se compensa con su paso por los maravillosos espacios de la Sierra. Al cruzarlos no viajaremos casi nunca solos, pues es frecuente encontrarse con otros senderistas o cicloturistas, cada cual guiado por su razón para ascender a Lluc.
Hay quien peregrina por el hecho religioso, otros por lo que supone de reto deportivo, muchos tan sólo hacen turismo a pie —forma inmejorable de conocer la isla— y, no pocos, porque presienten que en el Monasterio, la fuerza espiritual o las energías telúricas se reciben con mayor intensidad cuando, tras la larga caminata, se atraviesa el pórtico de entrada a la antigua Plaça dels Oms, hoy llamada Plaça des Pelegrins.
El final de la subida a Lluc se encuentra en el Pujol des Misteris o Puig de los Misterios, elevación rocosa donde una cruz de acero y una pequeña capilla marcan el lugar en el que el pastor encontró la imagen de la Virgen. En los laterales del recorrido encontraremos los bajorrelieves de los Misterios del Rosario, fundidos en bronce por el escultor modernista Josep Llimona en 1913.
Al caer la tarde, sentado en lo alto de un risco próximo a la cruz, sin una sola alma en los alrededores y acariciado por una suave brisa, disfruté en silencio de una de las más plácidas puestas de sol que Mallorca me ha regalado. Dejaba simplemente pasar el tiempo mientras feliz, veía cómo la luz se retiraba por el collado que da al Clot d´Albarca y el firmamento se teñía de naranjas, rojos y púrpura que, lentamente, daban paso a una tranquila noche de plenitud y misterio.
(Fin de la Primera parte).
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Pues lo he leído antes de acostarme y me voy como llena de paz, qué bien descrito y no conocía al escultor modernista de los bajo relives así que lo buscaré. Desde luego, aunque conozco Mallorca, he explorado más sus playas que su riqueza artística y desde que te sigo en el blog, s eimponen nuevas visitas, con nuevas miradas. Gracias amigo
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Me alegro de que así sea Leticia y también, de que te haya despertado el instinto explorador de otras realidades que nos da Mallorca. En breve publicaré la segunda parte de esta entrada y seguramente una tercera. El Monasterio de Lluc daría para mucho más, pero el resto lo dejaré para que cada uno descubra lo que más le atraiga. Muchas gracias por tu comentario :))
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